¿Qué rostro tiene Jesús?

Últimamente me pregunto, cuando la gente reza, ¿a cual imagen de Jesús le habla?
A ese Jesús lejano. Por el cual debes a travesar los mares, los desiertos, internarte por días en calles de arena. O a ese Jesús que se ve por todos lados como si tuviera pasaporte para entrar a donde quiera. Ese Jesús con cara de Josh, Steve, Nick que me encuentro al salir de mi departamento.

Tengo una opinión saliendo de mi garganta desde hace días.
Fui a un concierto de música escandinava en un museo de arte moderno. Al concierto le doy 4 estrellas. A la señora sentada a dos asientos de mi le doy 4.5. A la primera exhibición: Arte Europeo la doy un -0. Solo porque ya he generado una parcialidad a todo lo que solo represente a una porción de la humanidad. A una diminuta, injusta porción de la humanidad.
Así como dice, Arte Europeo, solo veía mujeres blancas desnudas y  hombres blancos portando joyas, coronas y atuendos pesados de pieles. Para mi ese tipo de arte es aburrido. Solo me saca un coraje con solo leer las reseñas de cada cuadro. Por mucho tiempo dicho museo solo exhibió este tipo de arte. Por las diferentes etapas por las que ha atravesado la dinámica social se han visto en la necesidad de dar una pizca de diversidad.
Al fondo a la derecha pude apreciar cuadros con figuras tejidas con frases árabes de una artista Egipcia. Tuve que googlear que idioma hablan en Egipto. Porque mi educación aun se enfoca en lo que lo que gente blanca hizo hace 200 años. Estos cuadros tejidos fueron la manera que la artista encontró para hablarle al mundo sobre la revolución Egipcia en 2011. Tuve que hacer uso de google una vez más. Tal vez me perdí de la revolución Egipcia o tal vez lo olvidé.

Entre el arte europeo y las Revolución Egipcia se encontraba la exhibición fotográfica de Diane Arbus. Tuve una obsesión con Diana Arbus hace algunos años. Así que sí me emocioné poquito. Entre todas las fotos, me enfoqué en leer la historia de una chica de ascendencia Japonesa. Nacida en California durante el conflicto Estados Unidos- Japón. Sus padres decidieron mandarla a vivir a Japón. A pesar que no sabía el idioma, y jamás había pisado la tierra. Para sus padres fue la mejor opción, ya que se corría la voz sobre las represalias que el gobierno de Estados Unidos tomaría contra los Japoneses sin importar su estatus de origen ¨americano¨. Una vez que esta chica es mandada a Japón se entera que sus padres fueron internados en un campo. Desde aquí la chica se enfoca la mayor parte de su vida intentando regresar a Estados Unidos para volver a ver a su familia. En Japón tampoco la pasa muy bien. Ya que ante el gobierno Japones ella era considerado un enemigo solo por ser nacida en Estados Unidos. Le fue difícil hacer una vida. Nadie le daba trabajo. Hasta que un hombre la contrata como secretaria. Tuvo otros trabajos. Uno importante que no recuerdo. Después de mucho dinero en abogados, y peleas con el gobierno logra regresar a Estados Unidos. Logra ver a su padre. tan tan

Unas mujeres blancas aproximadamente de la tercera edad elogiaban el arte europeo diciendo: esta es una muy buena exhibición, hermosas mujeres, rostros perfectos.
Reí en mi mente. 

Saliendo del museo camine por el frío, el agua de Seattle. Tomé un camión a mi casa. Antes de eso vi personas con pancartas gritando no a la intervención de Estados Unidos en Irán.

Habrá artistas hablándonos de esto en un par de años, pensé. Pero siempre tendremos hermosas mujeres con rostros perfectos para olvidarlo.







Comentarios

Entradas populares de este blog

Cristina, 27 años. Extraña a sus amigas. Quiere más aventuras y disfrutar.

Natalia en el mundo